Uno de los mayores retos que la APA está acometiendo reside en la mejora de la calidad del aire del entorno portuario, especialmente en el control de las emisiones producidas por fuentes difusas, y en concreto, por la manipulación de graneles sólidos a la intemperie.
Las medidas que la APA ha implementado para garantizar que se cumplan los objetivos de calidad del aire ambiental exigidos por la normativa vigente son de dos tipos: por un lado, correctoras, mediante la implementación de barreras cortavientos, cañones nebulizadores y difusores de agua para la humidificación de los acopios y/o creación de una atmósfera húmeda de apoyo a las pantallas así como la localización de lavarruedas en las áreas de mayor tránsito; por otro, a través de un mejor control operacional, de forma que se interviene directamente sobre las operaciones de manipulación a partir de unas determinadas condiciones de dirección y velocidad del viento, entre otros factores.
Con el objeto de lograr dichos objetivos, desde la División de Innovación Sostenible se realiza una monitorización en continuo de los niveles de inmisión (PM10) que se recogen en las cuatro estaciones de control de la calidad del aire que la APA tiene situadas en zonas de contacto con la ciudad, y que están conectadas a la Red Valenciana de Vigilancia y Control de la Contaminación Atmosférica. Asimismo se dispone de varias estaciones meteorológicas que nos permite establecer y controlar los rangos de seguridad operacional.
Datos provisionales de calidad del aire 2023